Navidad sin...

Soy de esas personas que a pesar de los años sigue con ilusión las navidades… si… soy así de niña… ¿y qué? Me encanta hacer la carta de Reyes, decorar la casa de tonos rojos, ir a comprar los regalos, envolverlos, ponerlos bajo el árbol y luego ver como la gente los abre con ilusión el día de navidad.
Pero creo que voy descubriendo porque a los mayores cada vez más, estas fiestas les gustan menos… y no es por el barullo de la gente o el exceso consumismo… al menos no solo es eso… Estas fechas son ideales para juntarse con la gente que quieres. Para recordar anteriores navidades en las que desfasabas con tu familia, tu padre se disfrazaba y tu salías con tus primos cuando tocaban las 12 campanadas con sprays de nieve a la calle para terminar como auténticos muñecos de nieve. Todo eran risas y bromas y olvidabas por unas noches la realidad del momento. Lo malo está cuando te sientas en la mesa, el día de navidad, con todos… ¿todos? No… ya no podemos decir todos… y a pesar de las risas, de reencuentros, de nuevas personitas celebrando su primera navidad… a pesar del “ambiente navideño” no puedes evitar sentir una pena sin fondo dentro de ti. Porque ya nunca más serán lo mismo… Porque el día se mezcla con la alegría de los nuevos y la pena de aquellos que ya nunca más estarán con nosotros. Porque lo que dice el anuncio de “vuelve a casa por navidad”… ya no se hará realidad…
Nunca te olvido.

Dicen que no hay que esperar nada de nadie, pero... ¿ni de las personas a las que quieres? Quizás... tal vez... a veces... es mejor no esperar.... es mejor no querer..................

Otra fecha más

Hoy es uno de esos días en los que me acuerdo más de ti. Y quizás son las fechas… o quizás es solo que cuando una está más sensible apareces para rematar… Necesito que alguien me abrace y me haga sentir que no estoy sola… Grito en silencio pues no me queda más voz y hasta yo misma siento que ya grité demasiado… Demando un cariño que me dabas hace años sin pedir y quizás es por eso por el que no recibo respuesta… nunca necesité pedirlo y ahora… ahora quizás no sé hacerlo… sino… ¿por qué me siento hoy tan sola? Recuerdos que vuelven a la mente y me provocan aborrecer algo que siempre disfruté… ¿para que engañarme…? Las navidades nunca más volverán a ser las mismas sin ti… Mientras tanto, me acurruco en mi cama a la espera de que alguien me de el cariño que ahora mismo necesito y el cual… no sé como pedirlo…

Sin tiempo ni pa mi Luna

Cuanto tiempo y que abandonadita tengo mi luna… Algunos amigos me dicen que si la tengo así es buena señal porque la gran mayoría de veces cuando escribo es porque me ha pasado algo malo o me encuentro mal… No siempre es así pero si que es verdad que mi luna me sirve de desahogo y me hace muy bien. Pero si no he escrito ha sido por no tener tiempo y estar demasiado estresada con demasiadas cosas… Es posible que ese estado de estrés y ahogo diario sea lo que provoque que no tenga tiempo para pensar si estoy bien o si estoy mal… Ni si quiera ahora puedo pararme a reflexionar… solo puedo decir que estoy, que no es poco y que me encuentro como en una realidad paralela respecto a mis emociones y eso… eso puede ser tanto bueno como malo… porque tarde o temprano saldrá a la luz todo aquello que estoy aplazando por sentir y que evito pensar.

Mientras tanto. Disfruto de mi día a día ahogado y sin tiempo para nada. Disfruto por no acabar suicidándome y con la vista puesta a que en una semana ya es Navidad y entonces tendré todo el tiempo del mundo para vosotros… y para mi…