Su partida

30 agosto 2007

Se acercaba su partida. Dentro de poco dejaría toda su vida atrás. Katerina lo sabía, abandonaría sus recuerdos, pues, ¿cuanto podría caberle en esa escualida maleta? De todas formas ¿como elegir que era aquello que debía llevarse? o mejor dicho... ¿como elegir aquello que debía dejar...?
Katerina sentía miedo, pero era ese miedo el que la impulsaba a marcharse. ¿Alguna vez la comprenderían? ¿Podrían perdonarla? Sabía que aquí su vida se apagaba. Necesitaba volar lejos de todo lo que conocia y sentirse capaz de todo.
Un hormigueo le recorrió su estomago. Sus oscuros ojos se postraron sobre un album de fotos que esta abierto sobre su mesita de noche. Katerina lo comprendió ahora...
Dejó su escualida maleta sobre su cama, todavia sin hacer. Dejó el album de fotos que se encontraba sobre su mesita de noche cerrado y boca abajo, cogió su mp4 y apoyada sobre su escritorio, mirando más allá del horizonte, escuchó esa canción y dejó que resbalaran las ultimas lagrimas que se permitia por esa historia.

Me gustaria poner un enlace de la canción...pero soy torpe y es xungo y mi pobre Marina ya tiene suficiente con su proyecto del Master asi que dejo el titulo y la autora, y quien quiera, que se la baje del emule: Algo bonito de Conchita

Reglas del paracaidismo

28 agosto 2007

Primera regla: Antes de volar es necesario encontrar unas alas de tu tamaño. No valen cualquiera. Y no importa que creas que son las correctas (eso nunca sucederá). Recuerda, uno piensa con la cabeza…. Prohibido utilizar cualquier otro órgano de tu cuerpo para tomar decisiones. Y no me vale decir que “sientes que son esas” ……….¿sentir? uno cuando se deja sentir termina estampado contra el suelo. Por eso nunca se debe volar a cuerpo descubierto(y esto nos lleva a la segunda regla).
Segunda regla: utiliza una buena armadura fija para evitar posibles estúpidas tentaciones de quitártela. ¿Por qué? Porque incluso, siendo racional en tu elección de las alas puedes equivocarte y una caída a tanta altura y velocidad puede destrozarte (hazme caso).
Tercera regla: por muy preparado que “creas estarlo” confia en mi, no te tires, no merece la pena. Quédate con tus alas, déjate la armadura puesta y mira desde las alturas ese diminuto mundo ¿A que parece que puedas tocarlo en su plenitud con tus manos? ¿para que descender entonces? Ahora tienes el mundo en tu poder. La mortalidad no es recomendable. Total ¿Qué es un mortal sin esperanzas?

Sigue y suma

26 agosto 2007

Las nubes han descendido ¿Acaso no las ve? Vuelve a ser invierno y se deja la chaqueta en casa. Un escalofrío recorre cada poro de su piel… se lo has buscado ¿Por qué no mira el cielo antes de salir? Solo coge un mazo roto (y además no era suyo) y sale a caminar ¿A dónde? Ni si quiera ella lo sabe ¿Pero acaso eso importa? Se guarda algo en el bolsillo y se pone el gorro de lana ¿Un poco tarde no? Se mira en el espejo y se ríe. Le da la espalda y se marcha con un convencimiento nada usual en ella. Pero no se oye la puerta al cerrarse tras de sí y no se ve su silueta caminar perdida por la ciudad. Y entonces me doy cuenta. Esa persona nunca existió y yo continuo sola bajo mi paranoia.

Echar a correr

21 agosto 2007

El pequeño duende descendió de lo que creí que era un avion de celofán amarillo. Se le veia cansado y nervioso. Se desabrochó su camisa a cuadros y tiró sus botines al aire. Sacó algo similar a una papelina y empezó a liarse un estraño manojo de hierbas con ello. Lo hizo con cuidado, mucho cuidado y una vez terminado me lo ofreció. Le sonreí ¿Acaso él me podia ver a mi? negé con la cabeza y le ofrecí amablemente mi mechero de los canutos. El pequeño duende hizo una mueca de desaprobacion. Dio media vuelta, subió a lo que yo creí que era un avión de celofán amarillo, y desapareció.
Me quedé estupefacta… ¿Qué habia ocurrido? Entonces me di cuenta que se habia olvidado sus botines. Me asomé a la ventana y le grité, pero ya no me oyó (o quizás no quiso hacerlo…). Me di la vuelta dispuesta a recogerlos pero ya no estaban. En su lugar se hallaba un estraño grabado: “….echar a correr……”

Buuuu sa fait pour

19 agosto 2007

Peces de colores surcando los cielos. Gotas de lluvia que regresan a su nuve y una mirada que te habla, quizás en otro idioma, quizás en silencio, o solo quizás está ciego. Coges el mazo y lo guardas, no cabe en tu maleta, por lo menos no en esta. Esa hormiga, la de tu ombligo, la unica a la que entiendes, se abanica y se rie “buuu sa fait pour” y mientras tanto yo, o quizás tú, ignora su advertencia pues solo la ironia de una hormiga es la culpable de esconder el mazo en tu maleta.

Sueños de madrugadas

18 agosto 2007

Me pierdo entre mis remolinos de buena mañana. Sobrevuelo tu café y aspiro el aroma que desprendes recien levantado. Cepillo en la distancia tu cabello con mis dedos. Beso tu cuello y acaricio tus labios. Observo esa mirada ausente que me devuelve a la realidad. Desciendo a tu lado, a unos cien kilometros de tus pensamientos, a un susurro de mis deseos, y me despierto sola, una vez más.